Padre eterno

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Isaías 9:6 (NTV)

Pues nos ha nacido un niño, un hijo se nos ha dado; el gobierno descansará sobre sus hombros, y será llamado: Consejero Maravilloso, Dios Poderoso, Padre Eterno, Príncipe de Paz.”

Hoy más que nunca, nuestra sociedad pide “a gritos” la presencia de los Padres en la Familia y en especial la del Papá. La falta de un adecuado y efectivo ejercicio de la Paternidad, ante un mundo allá afuera perverso, ha derivado en consecuencias que impactan directamente a nuestro Hijos, nuestras Familias, nuestra Sociedad y nuestras Generaciones.

Este rol es muy importante para DIOS; el cual, tiene un impacto directo en el destino de nuestros Hijos, ya que somos responsables por sus vidas ante ÉL – nadie más las tiene – y ÉL nos pedirá cuentas en su momento.

Es entonces cuando surgen preguntas clave desde lo más profundo de nuestro corazón como: ¿Dónde estoy hoy en cuanto a mi Paternidad? … ¿Cómo lo estoy haciendo? … ¿Cuál es el modelo que estoy siguiendo?… Meditemos en lo siguiente:

• Nuestro rol como Papá, tiene un impacto en lo eterno. Al ser creados a su imagen y semejanza, en su gran amor, DIOS comparte con nosotros su Paternidad; por lo tanto, la responsabilidad que tenemos al ser Papás trasciende por la eternidad. Y precisamente es que, en este ejercicio de la Paternidad, DIOS nos envía a su Hijo Amado Jesucristo para el cumplimiento de su propósito eterno: ¡Nuestra Salvación!» Pues Dios amó tanto al mundo que dio[a] a su único Hijo, para que todo el que crea en él no se pierda, sino que tenga vida eterna. Dios no envió a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para salvarlo por medio de él. <Juan 3:16-17> (NTV)

Nuestros Hijos, tienen un propósito que trasciende por la eternidad y necesitamos guardarlos, cuidarlos, protegerlos con celo, con amor, con instrucción, con disciplina, con el temor de DIOS… porque hay un mundo, un Faraón allá afuera que nos los quiere arrebatar y no podemos permitirlo.

• Nuestro Ejemplo – Perla de gran precio. Nuestro Hijos son nuestro reflejo. Queramos o no, Ellos cuentan día a día nuestra historia – Qué tan importante es, que, para el pueblo de Israel en la época de los Reyes del Antiguo Testamento, representó un periodo de 200 años en donde hubo 20 de Ellos que gobernaron el Reino del Norte, y sin excepción, todos hicieron lo malo llevando finalmente al pueblo a ser siervos de otra nación:

<1 Reyes 15:26> (NTV) Él (Nadab) hizo lo malo a los ojos del Señor y siguió el ejemplo de su padre; continuó con los pecados que Jeroboam hizo cometer a Israel.

<1 Reyes 22:52> (NTV) Él (Ocozías) hizo lo malo a los ojos del Señor al seguir el ejemplo de su padre y de su madre y también el ejemplo de Jeroboam, hijo de Nabat, quien había hecho pecar a Israel.

<2 Reyes 21:21 > (NTV) (Amón) Siguió el ejemplo de su padre al rendirles culto a los mismos ídolos que su padre había venerado.

El ejemplo que nos dieron nuestros Papás durante nuestra niñez y formación, sin duda han influido en cómo ejercemos nuestra Paternidad el día de hoy – no obstante, tenemos la oportunidad de acercarnos al Trono de Gracia y pedir a Nuestro Padre Celestial, el Creador de la Paternidad, que nos ayude a corregir y por consecuencia a mejorar el ejemplo que estamos dando – Nuestros Hijos tienen que aprender cómo es DIOS al vernos.

• Humildad – Tengamos la Actitud de Cristo. Nadie nos enseñó a ser Papás; no hubo una Escuela para Padres con un Plan de Estudios, Exámenes, Trabajos Finales, Ceremonia de Graduación al que tuviéramos acceso – nos ha tocado experimentar nuestra Paternidad con nuestros Hijos, y por consecuencia, no hemos sido perfectos – hemos cometido muchos errores que hay que reconocer y de los cuales hay que arrepentirnos, aprender de ellos, ajustar y levantarnos con una nueva Actitud de reconocimiento de que necesitamos a DIOS para que nos ayude.

No podemos dejar que nuestros Hijos crezcan con la idea de un DIOS que no permite errores, sino mostrarles que DIOS es paciente y misericordioso. Un cambio en nuestra actitud, producirá un ambiente distinto – diferente, que será plataforma para enviarlos a que cumplan su destino. El Apóstol Pablo nos exhorta a adoptar la Actitud de Cristo:

“Tengan la misma actitud que tuvo Cristo Jesús. Aunque era Dios, no consideró que el ser igual a Dios fuera algo a lo cual aferrarse. En cambio, renunció a sus privilegios divinos; adoptó la humilde posición de un esclavo y nació como un ser humano. Cuando apareció en forma de hombre, se humilló a sí mismo en obediencia a Dios y murió en una cruz como morían los criminales.” (Filipenses 2:5-8 NTV)

Pongámonos a cuentas:

 Con DIOS, reconociendo que lo necesitamos en medio de nuestra Familia, de nuestro Matrimonio, de nuestra relación con nuestros Hijos.

“Alguien que está solo puede ser atacado y vencido, pero si son dos, se ponen de espalda con espalda y vencen; mejor todavía si son tres, porque una cuerda triple no se corta fácilmente.” (Eclesiastés 4:12 NTV)

 Con Nosotros mismos, reconociendo mis fallas y mis errores.

“Pues reconozco mis rebeliones; día y noche me persiguen.” (Salmos 51:3 NTV)

 Con nuestra Esposa, Con nuestros Hijos, reconociendo mis ofensas, mi mal carácter, las heridas que quizás consciente o inconscientemente he provocado.

“¿Cómo puedo conocer todos los pecados escondidos en mi corazón? Límpiame de estas faltas ocultas. ¡Libra a tu siervo de pecar intencionalmente! No permitas que estos pecados me controlen…” (Salmos 19:12-13 NTV)

• Temor de DIOS – Verdadera Sabiduría. ¿Qué no es? …No es un miedo a DIOS, no es algo que nos lleve a paralizarnos por pensar en un DIOS castigador porque hicimos algo malo y nos aleje de Él – de ninguna manera. El Temor de DIOS es una actitud de reverencia y respeto – de reconocer su grandeza, su gloria, su victoria, su majestad, su poder, su eternidad; es tener presente de que siempre está a nuestro lado, y esa presencia me inspira a no hacer lo malo – sino lo bueno – es una manera de vivir. No temer a DIOS equivale a rechazar rotundamente la sabiduría.

“El temor del Señor es el principio de la sabiduría; los necios desprecian la sabiduría y la instrucción.2 (Proverbios 1:7 LBLA)

Guiemos a nuestros Hijos en el Temor de DIOS, reconociéndolo en todos sus caminos para que reciban esta sabiduría que los protegerá del mal. (Proverbios 2 (NTV)

Hagamos conciencia de este rol tan importante. Levantemos nuestro clamor hacia el cielo para que el Espíritu Santo nos instruya, nos guíe para ver, entender, comprender y atesorar la paternidad; y, asimismo, que nos capacite para ser el Padre que ÉL diseñó que fuéramos y que nuestros Hijos necesitan.

¡Hoy puede ser un BUEN INICIO! …No estamos solos. DIOS quiere hacer grandes cosas en cada uno de Nosotros mediante el ejercicio efectivo del rol que nos ha dado como Papás; quiere continuar la obra transformadora de nuestro carácter, de nuestra imagen a la de Nuestro Señor Jesucristo. Su Ejemplo debemos conocerlo y seguirlo

“No abusen de la autoridad que tienen sobre los que están a su cargo, sino guíenlos con su buen ejemplo” (1 Pedro 5:3 NTV).

Busquemos en este inicio, lograr victorias pequeñas al poner en práctica, por obra, esta Palabra y veamos cómo la mano de DIOS se empieza a mover a nuestro favor en nuestra vida, la de nuestros Hijos y la de nuestra Familia.

Dios les bendiga grandemente.

Guillermo.

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